Hoy más que nunca escuchamos de parejas que se animan a adoptar un bebé luego de intentar por varios años convertirse en padres biológicos.
Amar a este pequeño(a) no surge de la noche a la mañana. En algunos, casos, la adopción requiere cambiar completamente la manera de pensar para quienes se aferraron a la ilusión de cuidar a su propio bebé, y ahora deben mostrar el mismo entusiasmo, o al menos empezar a enamorarse de esta posibilidad a través de la adopción.
Sin duda, tomar la decisión requiere de tiempo y también del apoyo emocional que tanto tu pareja, amigos e incluso profesionales en la salud pueden brindarnos en los meses previos al cambio. Los temores más comunes se formarán en torno al rechazo que nuestra familia pudiera mostrar hacia el bebé o el riesgo de que la madre biológica algún día quiera quitarnos al niño.
Sentirnos así es perfectamente natural, pero te aseguramos que en la primera fase del proceso de adopción desterrarás todas tus dudas. Ánimo para este nuevo comenzar.