A la hora de plantearse el convertirse en donante de óvulos es necesario someterse a un exhaustivo exámen que determine el nivel de fertilidad de la mujer y sus posibilidades como donante. Las pruebas en las que consiste un examen de fertilidad son las siguientes:
ECOSONOGRAMA VAGINAL: que permite conocer la anatomía de los órganos reproductivos, descubriendo las causas de los ciclos irregulares, descartando la presencia de quistes, miomas, pólipos y otras alteraciones del aparato reproductor.
EXAMEN GINECOLÓGICO (incluyendo el Examen de Papanicolau)
ESTUDIO CROMOSÓMICO: (Cariotipo): que permite descartar anomalías cromosómicas que se pudieran transmitir a sus propios hijos.
DESPISTAJE DE INFECCIONES: para descartar enfermedades como Virus de Inmunodeficiencia Humana (VIH), Hepatitis, sífilis, citomegalovirus, herpes genital, rubéola o toxoplasmosis.
HEMATOLOGÍA COMPLETA: es otro de los estudios de fertilidad que se realiza antes de la donación de óvulos y que permite conocer el grupo sanguíneo y Rh.
ASESORAMIENTO PSICOLÓGICO: para aclarar posibles dudas y ayudar en la toma de decisiones