El seminograma o espermiograma es una prueba de laboratorio que se realiza a la muestra de esperma y que sirve fundamentalmente para evaluar el nivel de fertilidad del hombre. Es una de las pruebas para detectar la infertilidad masculina y se realiza de forma macroscópica y microscópica y en ella se analizan parámetros como el pH del semen, el volumen, la licuefacción, la viscosidad del esperma, el recuento de espermatozoides, la motilidad, la viabilidad y la morfología.

Cómo se hace un espermiograma

Con el objetivo de garantizar la máxima fiabilidad de los resultados del semiograma, la muestra debe ser obtenida teniendo en cuenta las siguientes cuestiones:

• Según la OMS para realizar esta prueba es importante guardar un periodo de abstiencia sexual de entre 3 y 5 días.
• Para obtener resultados fiables se recomiendan al menos dos seminogramas con un espacio de tiempo no inferior a tres meses entre ellos.
• La muestra del eyaculado se recoge en un bote estéril.
• El esperma se obtiene mediante masturbación en unas condiciones mínimas de higiene para evitar contaminar la muestra, lavándose antes las manos y genitales con agua y jabón.
• La muestra recogida se debe mantener a una temperatura de entre 20º y 37º para ser válida.
• Es importante obtener el total de la muestra para que el análisis del mismo sea representativo.

Dependiendo del laboratorio normalmente se entregan los resultados en una media de tres días.

Cómo se interpreta un espermiograma

También se puede realizar un espermiograma como prueba de screening tras la práctica de una vasectomía para asegurar la eficacia de la misma. Los parámetros que se estudian en el seminograma y sus valores de referencia son:

Mediante examen macroscópico, se estudia la viscosidad del semen, su nivel de licuefacción, color, volumen, PH y olor:

• Volumen: el volumen debe ser mayor de 2 ml. Si una muestra presenta menos de 2 ml se denomina hipospermia. Un volumen inferior podría indicar una obstrucción causada por una infección genital, alteración congénita de los vasos deferentes, o eyaculación retrógrada.
• Viscosidad: El semen una vez licuado debe ser ligeramente más viscoso que el agua. Cuando la muestra es altamente viscosa, puede ser debido a una disfunción prostática, eyaculación frecuente, y/o a un estado psicológico del paciente. Este aumento de viscosidad no supone una causa directa de infertilidad, pero puede afectar a las posteriores evaluaciones del seminograma como su concentración y motilidad espermática.
• Licuefacción: al ser recogida la muestra de semen, esta presenta un estado de coagulación, y necesita licuarse para proceder a su estudio. La licuefacción se da tras 20-30 minutos. Si no se produce puede indicar algún tipo de disfunción a nivel prostático.

Mediante examen microscópico se examina la concentración de espermatozoides, su vitalidad, morfología, aglutinación, entre otros:

• pH: el pH debe estar entre 7.2 y 8.1, aunque no existe evidencia de que un valor superior a 8.1 sea negativo. Por el contrario, valores inferiores pueden indicar una infección genital.
• Recuento espermático: los valores normales deben estar por encima de 20 millones/ml. Saber más sobre el recuento espermático.
• Motilidad: la motilidad se basa en la observación de la muestra a través del microscopio, y determina la movilidad de los espermatozoides.
• Vitalidad espermática: la vitalidad nos permite saber el número de espermatozoides vivos, aunque estos no se muevan. Se utiliza una tinción que tiñe los espermatozoides muertos. Cuando el valor es inferior al 60%, se habla de una muestra necrozoospérmica.
• Morfología: Es el estudio de la forma del espermatozoide. Se realiza utilizando los criterios estrictos de Tygerberg, en los cuales una muestra se considera morfológicamente normal cuando los el número de espermatozoides normales es igual o superior al 4%.