Esta técnica consiste en eliminar todos los pensamientos negativos de nuestra mente y reemplazarlos por ideas placenteras sobre nuestra salud.
Las parejas que buscan concebir usan este método para liberarse del pesimismo que en algún momento puede convertirse en su peor enemigo. Pensar en lugares hermosos de la naturaleza los ayuda a sentirse más relajados.
Asimismo, imaginar un resultado favorable para cada situación disminuye el estrés y con una visión más positiva de la vida se estimula la fertilidad. Cuando alcances este estado de tranquilidad pasa al segundo nivel, el cual consiste en mandar ideas alentadoras a los órganos reproductores, que son los que inciden directamente sobre la fertilidad. Eso significa que si estás buscando ser madre, tu mente debe visualizar la unión del óvulo y espermatozoide o tener muy presente que tus ovarios desprenderán un óvulo maduro y sano.
Logra que tu imaginación vaya más allá de las imágenes. Si te concentras muy bien podrás percibir olores, sabores y hasta sensaciones en tu piel. ¡Inténtalo!
