El sueño es fundamental para nuestra calidad de vida, salud y fertilidad. Dormir bien nos ayuda a tener una vida equilibrada y más descansada, lo que favorece a nuestro cuerpo. A continuación te damos algunos consejos para lograr un sueño profundo y reparador.

• No trabajes hasta muy tarde. Tu cerebro necesita tiempo para desconectar, y te llevarás las preocupaciones a la cama. Lo mismo ocurre con ver televisión; en lugar de eso, prueba a leer un libro.
• Controla lo que comes. Intenta cenar al menos dos horas antes de acostarte y no te excedas con las cantidades. Tu digestión y tu sueño saldrán ganando. Por la noche no tomes alcohol, bebidas con cafeína ni bebidas ricas en vitamina C (como el zumo de naranja), pues son estimulantes y no te dejarán dormir. Tómate una infusión, por ejemplo, una manzanilla.
• Las mujeres deberían tomar un baño relajante en un cuarto de baño con iluminación suave. Sin embargo, los hombres deberían evitarlo, ya que los baños calientes aumentan la temperatura de los testículos, lo cual no favorecerá la producción de espermatozoides.
• Intenta acostarte a una hora similar cada noche y levantarte a una hora similar cada día, fines de semana incluidos. Mantén el dormitorio a oscuras y en silencio.
• No te pases horas dando vueltas en la cama. Si no puedes dormir, prueba a tensar y luego relajar todos los músculos del cuerpo, empezando por los dedos de los pies y ascendiendo. Si aun así no puedes dormir, levántate, tómate una bebida caliente para relajarte, como, por ejemplo, leche caliente o una manzanilla, y lee un libro.