Antes de emprender algún tratamiento de fertilidad intenta mirar el tema de manera objetiva. ¿Qué método no utilizarías? ¿tienes los medios económicos para intentarlo todo?
Medita en el tiempo y en el dinero que invertirás. Lamentablemente no todas las parejas están en condiciones de hacer grandes inversiones en tratamientos de fecundación in vitro (FIV) y sumado a ello, algunas mujeres requieren de varios ciclos para quedar embarazadas.
Lo primero que necesitas evaluar es si el seguro en el que estás inscrita cubre parcial o totalmente el tratamiento. Recuerda considerar los costos a mediano plazo y también otros procedimientos, en caso el elegido no resulte.